UASD estima desaceleración economía dominicana sería de 2,0 a 1,6 % en 2019

0
OLYMPUS DIGITAL CAMERA

Una investigación de la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) advierte de que este año se producirá una desaceleración de la economía dominicana debido a la incertidumbre a nivel global, sobre todo en Estados Unidos, Europa y China, informó este martes la academia estatal.


El estudio, realizado por el Instituto de Investigación Socioeconómica (Inise) de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (FCES), se presentó durante una rueda de prensa ofrecida por el decano de la FCES, Alexi Martínez, el vicedecano, Antonio Ciriaco, y el director del Inise, Juan del Rosario.

“El crecimiento se ubicará en el rango del 5 por ciento al 5,4 por ciento, previéndose una disminución con relación al año 2018 que fue del 7 por ciento”, indica el estudio.

Otros factores que podrían influir en la desaceleración proyectada para República Dominicana son posibles alzas en el precio del petróleo, la profundización de la guerra comercial China-EE.UU., la crisis política venezolana, la salida de Reino Unido de la Unión Europea (Brexit), así como la volatilidad de los mercados financieros.

“Si la pérdida de dinamismo del crecimiento del producto interno bruto (PIB) en las principales economías del mundo se cumple, entonces el comportamiento de la economía dominicana estaría por debajo de lo pronosticado”, subrayaron los expertos.

Los resultados del estudio también reflejan la necesidad de que se produzca un aumento salarial en los sectores público y privado, que se sugiere sea del 30 %, como forma de estimular el consumo y, al mismo tiempo, impulsar el comportamiento tendencial del PIB.

De producirse un aumento salarial, esto dinamizará la economía e incrementará las ventas de las empresas, lo cual contribuirá a recuperar parte del salario real de los trabajadores de los sectores público y privado, señalaron durante la presentación de los datos.

La investigación concluye con una exhortación a las autoridades gubernamentales, ante la necesidad de desplegar cuantos esfuerzos sean necesarios para lograr “metas de política monetaria y cambiaria razonables”, y a seguir muy de cerca el comportamiento del endeudamiento externo y el déficit fiscal.