Un Descanso Bien Necesitado para los que Cuidan a las Personas con Alzheimer

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Estudio confirma que el cuidado de adultos durante el día proporciona un tiempo libre beneficioso

Un nuevo estudio indica que los centros de cuidados diarios para las personas con la enfermedad de Alzheimer pueden darle a sus esposos y a otros miembros de la familia que las cuidan una fuente para aliviar el estrés.

Esos centros ofrecen a las personas con demencia una oportunidad para socializar y tomar parte de actividades que estimulen sus mentes.  Los programas también pueden darles a los esposos, niños y otras personas que las cuidan un descanso.

Por consecuencia, eso debe aliviar el estrés diario de estos cuidadores.  Pero no ha habido mucha investigación que lo pruebe.

En el nuevo estudio, que fue publicado en la revista Gerontologist (Gerontología), los investigadores midieron los niveles de estrés de 173 personas que cuidaban a familiares en cuatro estados de los EE.UU., que utilizaron los centros de cuidado para sus familiares con demencia.

A través de entrevistas telefónicas, hallaron que los cuidadores estaban menos estresados y tuvieron menos ataques de ira en los días que cuidaban que otros días.  Y cuando los estresores o factores estresantes se manifestaban – como problemas en el trabajo – no les afectaba tanto emocionalmente.

«Yo pienso que esto refuerza el hecho de que los que cuidan a estas personas enfermas no lo pueden hacer por si solos.» Dijo Carol Steinberg, presidente de la Fundación de Alzheimer de América. «Las personas necesitan un descanso.»

El autor del estudio, Steven Zarit, agregó. «Hay un famoso libro [sobre cuidados de salud] que se llama ‘The 36-Hour Day (36 Horas al Día),’ y pienso que perfectamente lo describe,» él dijo. «Los cuidadores de personas enfermas necesitan ayuda.  Cuando obtienen un descanso, es una manera de recuperarse.»

Allan Vann, cuya esposa, Clare, tiene Alzheimer, dijo que él inicialmente pensó que él podía cuidarla por si solo.  Un director de escuela jubilado de Commack, N.Y., Vann dijo que él estaba acostumbrado al estrés diario y se imaginó que él tenía «hombros fuertes» para sobrellevar el trabajo de cuidar a su esposa.

Clare Vann fue diagnosticada con Alzheimer en el 2009 a la edad de 63 años – lo cual se considera un comienzo temprano de Alzheimer.  Sin embargo, se tomó tres años obtener ese diagnóstico.  Su esposo había comenzado a notar síntomas tres años antes, cuando ella estaba hablando con sus dos nietos – aunque ellos tenían cuatro – sobre un viaje a Francia, y ellos nunca habían estado allí.

En estos días, Clare necesita ayuda con sus actividades básicas diarias, como hacerse la higiene y vestirse. Ella también asiste a unos servicios de cuidados del adulto la mayoría de los días de la semana.

«Yo pienso que no podría vivir sin ese respiro,» dijo Allan.

Le da a él el tiempo para hacer mandados y tareas diarias – y para disfrutar de algunos placeres personales como leer y escribir, él dijo.  Escribir un diario, en particular, me ha ofrecido una manera de “ventilarme.»

Muchos cuidadores no saben sobre los centros de cuidados para adultos ya que los doctores no se los dicen, dijo Zarit, que es jefe de desarrollo humano y de estudios de familia de la Universidad Penn State. «Necesitamos hacer un mejor trabajo para entregar la información y así las personas se pueden beneficiar,» él dijo.

Tampoco los centros de cuidados para el adulto están disponibles en todas las áreas – especialmente las áreas rurales,  Steinberg mencionó – y las familias generalmente tienen que pagar la cuenta.  En los Estados Unidos, los centros de cuidados para adultos cobran alrededor de $70 por día, en promedio.

Hay otros tipos de «servicios de ayuda,» como los asistentes de salud pero las finanzas son siempre un obstáculo.  La asistencia en casa es aún más cara, dijo Zarit. Los que cuidan a otras personas también pueden encontrar grupos locales que envían a un voluntario a sus casas y ofrecerles el descanso que necesitan –aunque eso generalmente viene a ser unas pocas horas de ayuda a la semana o cada otra semana.

Vann también halló que hay ayuda a través de cuidadores de grupos de apoyo diseñados específicamente para esposos, ofrecida por la Fundación Long Island Alzheimer. «Mi consejo es que usted se involucre en un buen grupo de apoyo,» él dijo. Es de ayuda porque no solamente los otros miembros del grupo saben por lo que usted está pasando, Vann mencionó, sino que también ellos pueden compartir consejos prácticos.

En cuanto a las finanzas, Vann ha tenido relativamente suerte en eso ya que él y su esposa habían tomado un seguro de cuidados a largo plazo, lo cual les ayuda a cubrir los costos de servicios como cuidados en casa, servicios de cuidados temporales y hogares de ancianos o ancianatos.  Medicare, el programa de seguro de salud financiado por el gobierno para los estadounidenses de edad mayor, generalmente, no cubre el cuidado a largo plazo.

Eso es un gran problema para las familias, dijo Steinberg. «Estamos realmente presionando por una ayuda financiera para ellos,» ella dijo.

La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia y los expertos predicen que con el envejecimiento de la generación que se conoce como «Baby Boomer», el número de estadounidenses con Alzheimer se podría triplicar para el 2050, con casi 14 millones.

Eso podría substancialmente agregar más problemas al ya problema económico que existe de la enfermedad.  Un estudio reciente halló que en el 2010, el costo promedio de cuidar a un paciente con demencia era tan alto como unos $56,000.  La mayoría de ese dinero se iba en el cuidado a largo plazo y las familias tenían que llevar una gran parte de esa carga.