Las redes sociales más poderosas hoy que cualquier gobierno

0

Santo Domingo.- Sin lugar a dudas que la decisión adoptada por las plataformas de redes sociales Twitter, Facebook e Instagram de suspender  la cuenta a un presidente en ejercicio,   demostró el inmenso poder que hoy  tienen las millonarias corporaciones dueñas de las redes sociales.  

Esas empresas privadas con  sus extensos y bien elaborados contratos de adhesión,   son  una perfecta  camisa de fuerza, que  la mayoría de la gente al darles aceptar sin leerlos, se la ponen encima de  manera voluntaria y con muchísimo gusto.

A  pesar de ser  estas plataformas “espacios abiertos” a las diferentes opiniones y exhibir   niveles de tolerancia,  jamás antes visto en medios tradicionales masivos,  tienen  en sus manos,  el poder de decidir quién se puede montar o no  en su vehículo,  para difundir  su verdad o su “mentira honorable”, terminología  que  le escuche recientemente a   un  gran amigo.

Aunque el presidente ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, defendió la decisión de su empresa de suspender la cuenta del presidente Donald Trump, al tiempo que reconoció  que  la decisión de Twitter sienta un precedente “peligroso”, es oportuno preguntarse;    ¿Pero peligroso para quién?

La excusa pública ofrecida por el alto ejecutivo de Twitter,   dice más de lo que cualquiera se pueda imaginar,  porque aunque la decisión haya sido “la adecuada” dada   la circunstancias, el comportamiento de estas entidades privadas,  han impuesto en su accionar,  el mismo totalitarismo que dicen combatir.

Otra cosa, estas  empresas ante acontecimientos políticos  o sociales  similares  a los que vimos recientemente en EEUU,  pero que son muy comunes en otras latitudes, también  estarían en la obligación por lo menos moral de tener que medir a otros  con la misma  vara.

Si  bien es cierto  que no se pudiera asegurar que haya habido violación  la libertad de expresión,  por tratarse de empresas privadas,  no deja de tener importancia señalar;  que estas plataformas son  los únicos  medios masivos disponibles de gran alcance,  con capacidad de difundir   información o desinformación en segundos a todo el planeta.

Sin embargo no  deja de ser curioso,  lo  permisivas que son estas empresas  ante un sinnúmero  de agitadores sociales y políticos que son generalmente contrarios a gobiernos foráneos y   al  establishment.

Es decir; ciertos  incitadores  a la violencia convenientes  a sus  intereses,   pasan desapercibidos,  al igual  ocurre  con   depredadores  de la moral ajena,  y mercaderes de intimidades de adultos y niños.

Ahora bien,   varias  cosas sí quedaron  claras,  las redes sociales son mucho más poderosas que cualquier gobierno,  de hecho casi todos confluyen en ellas  para  poder llevar sus mensajes,  ante esa inmensa audiencia cautiva  en segundos,  y lo otro es  que para nada les importa el rango político o gubernamental, ni que tampoco  tenga  más de 80 millones de seguidores.