Las células B son conocidas por su papel en la producción de anticuerpos, pero también pueden contribuir al desarrollo de enfermedades autoinmunes.
Profesor Joshua Koenig del Departamento de Medicina, lideró las instrucciones para científicos con esta propuesta de manual. Foto: Brighterworld Mcmaster.
Investigadores de la Universidad McMaster han dado un paso significativo en la comprensión y detección de células B, un tipo de célula inmune crucial, que puede desempeñar un papel tanto en la defensa del cuerpo contra enfermedades como en el desarrollo de alergias y enfermedades autoinmunes.
De acuerdo al estudio, los investigadores han creado un manual de instrucciones que facilitará a los científicos de todo el mundo la identificación de estas células, difíciles de detectar.
El papel de las células B en las alergias alimentarias: una guía para su identificación y estudio
El estudio, liderado por la estudiante de doctorado Allyssa Phelps y el profesor asistente Josh Koenig del departamento de Medicina de McMaster, se enfocaron en la búsqueda de células B como parte de la investigación sobre alergias alimentarias. El estudio, fue publicado el 19 de enero en la prestigiosa revista Nature Protocols, este trabajo proporciona una guía detallada para identificar y estudiar estas células esquivas.
Por otra parte, las células B son conocidas por su papel en la producción de anticuerpos, un componente vital del sistema inmunológico que combate enfermedades como el cáncer y las infecciones. Sin embargo, también se ha demostrado que estas células desempeñan un papel en el desarrollo de enfermedades autoinmunes y alergias, lo que resalta la importancia de comprender y controlar su función.
Descubren un método para estudiar células B, consideradas ‘raras’ en la sangre humana
Koenig explica la dificultad inherente en el estudio de estas células: «Uno de los grandes problemas al intentar estudiar estas células B, las que producen estos anticuerpos que tienen todo tipo de funciones diferentes y muy importantes, es que son realmente, muy, raras». Para ilustrar este punto, menciona que estas células constituyen menos del 0,0001% de todas las células inmunes en la sangre humana.
De este modo, el equipo de investigación adoptó un método desarrollado por Justin Taylor de la Universidad de Virginia. Este método implica el uso de tetrámeros de antígenos para marcar y enriquecer de manera sensible células B específicas, lo que facilita su detección. Además, los tetrámeros, formados por cuatro moléculas de antígeno, pueden personalizarse para abarcar células B específicas relacionadas con diversas condiciones, desde alergias alimentarias hasta COVID-19.
Tetrámeros de alérgenos y antígenos en células B
«Después de utilizar la tecnología durante algunos años en varios de nuestros estudios y crear múltiples tetrámeros de alérgenos y tetrámeros de antígenos diferentes para otras personas, decidimos redactar un documento de protocolo para ayudar a otras personas a estudiar estas células B increíblemente importantes». Enfatizó Phelps
Además de su aplicación en el estudio de alergias, estos tetrámeros también se pueden utilizar para evaluar la eficacia de las vacunas. Koenig y su equipo colaboraron con otros investigadores de McMaster para determinar si una vacuna candidata activaba células B específicas relacionadas con COVID-19, lo que destaca el potencial de esta tecnología en la investigación médica.
Es importante destacar, que este avance no solo beneficiará la investigación sobre alergias y enfermedades autoinmunes, sino que también podría tener implicaciones más amplias en la comprensión y tratamiento de una variedad de condiciones médicas relacionadas con este tipo de células.
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