El 70% de los encuestados no ven posible o dudan que se pueda lograr un menú saludable por 2,5 euros por persona
MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) –
Seis de cada diez consumidores reconocen que intentan llevar una dieta equilibrada y saludable, pero la percepción de que comer saludable requiere mayor presupuesto y que, además, supone más tiempo y esfuerzo, se convierten en dos barreras a la hora de seguir hábitos de alimentación saludable, según se desprende de un estudio publicado por Dia España.
Así, la I edición del estudio ‘Radar SaluDiable: una mirada a los hábitos de alimentación y consumo’, analiza la evolución de los hábitos de compra y de alimentación de los clientes para «conocer sus necesidades y facilitar la adopción de una dieta equilibrada y nutritiva, sin que su presupuesto se vea comprometido», como detallan sus impulsores.
Esta encuesta –realizada con el soporte de la consultora de sostenibilidad Quiero– revela que el 85% de los entrevistados –812 clientes de Dia, de los cuales el 14% fueron hombres y el 82% mujeres– muestran una «alta conciencia y preocupación» por mantener una dieta saludable, y tratan de mantener buenos hábitos.
El estudio detalla que los consumidores adaptan su comportamiento de compra y buscan alternativas que ofrezcan la mejor relación calidad-precio, una tendencia más extendida entre las mujeres. Así, el 55% de los hogares manifiesta que busca marcas alternativas que ofrezcan la mejor relación calidad-precio, mientras que el 20% ha optado por reducir el volumen de sus compras, pero adquiere los mismos productos.
PRESUPUESTO Y TIEMPO: BARRERAS PARA SEGUIR UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE
Este compromiso con mantener una dieta equilibrada se ve afectado por la percepción de que comer saludable es más caro o es más difícil encontrar promociones y ofertas en este tipo de alimentos, combinado con la creencia de que mantener buenos hábitos requiere más tiempo y esfuerzo.
Respecto a la percepción de que hay que emplear un mayor presupuesto para comer saludable, casi el 80% de los encuestados que llevan o intentan realizar una dieta equilibrada asumen que estos alimentos son más caros. El 62% apunta directamente a que una dieta variada de frescos es más cara que otras dietas apoyadas en comidas preparadas o alimentos envasados, mientras que un 26% la considera igual de cara que otros tipos de alimentación.
Esta percepción, sin embargo, «no siempre es real», como señala el CEO de Nutritional Coaching y asesor nutricional de Dia, Jaume Giménez. «Planificar nuestros menús y lista de la compra, optando por frutas y verduras de temporada, combinado con alimentos ricos en proteína como las legumbres o pescados como las sardinas, vemos que el presupuesto necesario se reduce de forma significativa. La clave está en planificar y escoger bien», ha apostillado.
A este obstáculo se suma que un 24% de los encuestados percibe que no hay tantas promociones y ofertas en alimentos saludables, como sí las hay en otros productos de menor densidad nutricional. Ante esta percepción, siete de cada diez encuestados consideran imposible o dudan que sea posible elaborar una comida saludable a un coste de 2,5 euros por persona.
Sin embargo, pese al incremento del coste de vida, los hogares todavía tienen presente la relevancia de mantener hábitos de alimentación saludable. Mientras que el 49% confirman que han reducido el consumo de alimentos en bares y restaurantes, sobre todo en el caso de los hogares con hijos, y un 40% ha disminuido el consumo de productos capricho o referencias gourmet y bebidas, dos de cada diez consumidores ha reducido su consumo de alimentos frescos.
Otra de las «barreras» que se asumen a la hora de seguir una alimentación saludable es que «planificar y preparar este tipo de menús requiere más tiempo y esfuerzo que otras alternativas». Así lo consideran cuatro de cada diez encuestados. Precisamente, más del 20% de los encuestados que intentan llevar una dieta saludable afirman disponer de poco tiempo para comer y prefiere optar por comidas más rápidas, mientras que otros achacan la dificultad para llevar hábitos de alimentación saludables a que es difícil saber qué productos son saludables (14%) o que no conocen recetas atractivas (5%).
El estudio también pone el foco en la importancia que tiene el conocimiento sobre qué es una alimentación saludable, un factor que «se convierte en una asignatura pendiente». Cerca del 70% de los entrevistados cree conocer a la perfección qué alimentos son más sanos y cuáles no. Sin embargo, ante la duda, casi el 40% diría que todos los alimentos son saludables dentro de un consumo adecuado, mientras que el 36% atribuye esta falta de conocimiento a la diversidad de opiniones procedentes de su entorno social, medios de comunicación y redes sociales.
No obstante, más del 90% de los consumidores reconocen que comer alimentos de proximidad y de temporada es fundamental para tener una nutrición más saludable, un aspecto que «subraya la percepción de la población sobre el valor de estos productos como clave para llevar una dieta equilibrada».
ACCESIBILIDAD, CONOCIMIENTO Y HÁBITOS, LAS «CLAVES» PARA COMER MEJOR
Este ‘I Radar SaluDiable’ se enmarca en el compromiso que Dia impulsa a través de su programa ‘Comer mejor cada día: contribuir a mitigar las barreras alimentarias y facilitar la adopción de hábitos saludables’. A través de esta iniciativa, uno de los ejes del Plan de Sostenibilidad ‘Cada día cuenta’ de Grupo Dia, la compañía busca impulsar acciones para facilitar el acceso geográfico y económico a una alimentación de calidad y saludable y promover el conocimiento y la adopción de hábitos saludables.
Para promover el conocimiento y adopción de hábitos saludables, Dia publica en su web y en sus canales sociales contenido didáctico que muestra, como ha destacado, que «comer mejor cada día es fácil y puede lograrse dentro de un presupuesto».
Además, bajo el nombre de ‘SaluDiables’, la compañía identifica dentro de su surtido aquellos alimentos cuyo consumo habitual contribuyen a seguir una dieta equilibrada sin comprometer el presupuesto del hogar gracias a tres factores: «son productos de alta densidad nutricional, fáciles de incorporar a nuestros menús diarios y a precios asequibles».