Un científico ha descubierto por qué las personas tienden a despertarse antes por la mañana a medida que envejecen. El proceso natural de envejecimiento provoca cambios en el modo en que el cuerpo descansa y en la cantidad de sueño que necesita. A medida que envejecemos, nuestro cerebro es menos receptivo a la luz solar, las señales sociales y la actividad física, que indican la hora del día. El Dr. Sairam Parthasarathy, director del Centro del Sueño y la Ciencia Circadiana de la Universidad de Arizona, explicó el proceso a Huffpost. «Es probable que el cableado del cerebro no esté percibiendo y respondiendo a las entradas como debería. Esto es lo que llamamos dadores de tiempo, que dan tiempo al cerebro. En otras palabras, ayudan al cerebro a percibir en qué punto del ciclo circadiano de 24 horas se encuentra», explica. Las personas mayores tienen dificultades para registrar estos indicadores naturales, sobre todo a medida que se deteriora su visión. El Dr. Parthasarathy reveló que «los cambios de visión que se producen con la edad reducen la intensidad del grado de simulación luminosa que recibe nuestro cerebro». Se trata de un factor importante para ajustar nuestro reloj circadiano y mantenerlo en hora.