La diputada de ARENA por el Departamento de La Paz, en El Salvador, Rosa Romero, sufrió un inesperado incidente ayer cuando un perro la atacó mientras recorría el territorio. «Un perro me atacó y me generó heridas muy grandes en mis piernas», relató Romero. Afortunadamente, las heridas han sido tratadas adecuadamente, y la diputada se encuentra actualmente en recuperación.
La noticia del ataque se difundió rápidamente en las redes sociales, lo que provocó una ola de reacciones diversas. A pesar de la gravedad del evento, muchos usuarios expresaron su escepticismo y frustración hacia la figura política con comentarios sarcásticos y bromas. «Hasta los perros les guardan rencor», comentó un usuario, mientras que otro se preocupaba por el estado del perro involucrado en el incidente.
Algunos comentarios reflejan una actitud más compasiva y un llamado a la empatía, independientemente de las opiniones políticas. «Independientemente de que la señora sea política o no, cualquier persona puede correr peligro; no le encuentro el chiste sinceramente», expresó un usuario. Otros hicieron un llamado a la civilidad y al respeto mutuo, señalando que el odio y la división no contribuyen al progreso de El Salvador.
Este incidente destaca la creciente polarización y la intensidad de las emociones en torno a la política en las redes sociales, donde los usuarios no dudan en expresar sus sentimientos más crudos, ya sea con humor, indignación o compasión.
Escribió la diputada:
Mis queridos amigos y amigas:
Ayer mientras recorría el territorio, un perro me atacó y me generó heridas muy grandes en mis piernas. Las heridas ya fueron suturadas, y ya me encuentro en recuperación.
Más tarde, envió un agradecimiento:
Muchas gracias a todos por estar pendientes de mi estado de salud.
Hoy es un inicio de semana diferente, pero deseo de todo corazón que la bendición de Dios les acompañe y que su providencia divina nunca falte.
Cuando una persona es mordida por un perro, existen varios riesgos y consideraciones importantes para la atención inmediata:
Riesgos de una mordedura de perro:
Infecciones Bacterianas: Las mordeduras de perro pueden transmitir bacterias desde la boca del animal hasta el tejido humano, lo que puede resultar en infecciones como la rabia, el tétanos o infecciones por Pasteurella, Staphylococcus y Streptococcus.
Rabia: Aunque es rara en muchos países debido a las vacunas para perros, la rabia es una preocupación grave y potencialmente mortal si el perro no está vacunado.
Daño Tisular: Dependiendo de la gravedad de la mordida, puede haber desgarro de tejidos, músculos, tendones o nervios.
Daño Psicológico: Las mordeduras de perro pueden dejar a la víctima con un trauma psicológico, incluyendo el desarrollo de una fobia a los perros o PTSD.
Lesiones Óseas: En casos severos, sobre todo si el perro es grande y la víctima es un niño, pueden ocurrir fracturas óseas.
Atención Inmediata:
Limpieza de la herida: Lavar inmediatamente la herida con agua y jabón durante al menos 5 minutos.
Desinfección: Aplique un antiséptico para reducir el riesgo de infección.
Controlar el sangrado: Aplique una presión suave con un paño limpio para detener el sangrado.
Cubrir la herida: Utilice un vendaje estéril o una gasa limpia para proteger la herida.
Atención médica: Buscar atención médica lo antes posible, especialmente si la herida es profunda, no deja de sangrar, o si el perro es desconocido o podría estar infectado con rabia.
Vacunación antitetánica: Verifique si se requiere una vacuna antitetánica, especialmente si la última dosis fue hace más de 5 años.
Observar señales de infección: Estar atento a signos de infección como enrojecimiento, inflamación, aumento del dolor, fiebre o supuración.
Reporte: Si el perro no es de la propia persona, es importante reportar la mordedura a las autoridades locales para que puedan seguir el caso y verificar el estado de vacunación del animal.
Es importante recordar que incluso las heridas que parecen menores pueden infectarse. Por eso, la atención médica es esencial tras una mordedura de perro.
el estudio cientifico importante que aborda la cuestión de las mordeduras de perros es uno realizado por investigadores del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohioel cual revisó 15 años de casos de trauma facial relacionados con perros en pacientes tratados en el Hospital Nacional de Niños en ColumbusOhio, y el Sistema de salud de la Universidad de Virginia.
Los investigadores se enfocaron en el tamaño de la herida, el desgarro de tejidos, fracturas óseas y otras lesiones graves que requirieron la atención de un cirujano de trauma facial y reconstructivo.
También analizaron estudios literarios desde 1970 para determinar el riesgo relativo de mordedura de razas específicas y crearon una escala de severidad de daño. Las razas con el riesgo más alto de mordedura incluían al pit bull, razas mixtas y el pastor alemán, mientras que razas como el dálmata, el pointer, el gran danés, el pequinés y el spitz estaban en el extremo inferior del riesgo de mordedura.
Sin embargo, se destacó que las circunstancias que llevan a un perro a morder pueden variar y pueden estar influenciadas por las tendencias de comportamiento de la raza y el comportamiento de la víctima, los padres y el dueño del perro.
