La crisis climática y el aumento de los costos están marcando la producción de café en Estados Unidos. A medida que Colombia aumenta la producción, países como Perú, Costa Rica y Honduras enfrentan desafíos debido al clima extremo, los altos costos y los mercados volátiles.
Aunque los precios internacionales han aumentado, los pequeños productores luchan por obtener ganancias justas. En 2024, los precios del café alcanzaron niveles récord, impulsados por factores climáticos extremos que afectan a los principales países productores.
Este panorama ha remodelado la economía cafetalera mundial, beneficiando a algunos actores y desafiando a otros. Con un aumento del 70% en los precios del café Arábica, los productores y consumidores están bajo control.
La emergencia climática ha intensificado los desafíos para los principales países productores de café. Si bien algunos han aprovechado el auge de los precios, otros enfrentan dificultades estructurales y climáticas que amenazan la estabilidad del mercado. Con este panorama, la sostenibilidad y la innovación se han vuelto claves para el futuro del crecimiento mundial del café.
El aumento de los precios del café es consecuencia principalmente de las sequías en Vietnam e Indonesia, así como de las heladas que afectaron a Brasil en 2021 y 2022 y afectaron el 35% de la cosecha de café arábica del país sudamericano.
Brasil: el gigante en apuros
Brasil, el mayor productor de café del mundo, enfrenta un panorama incierto. Tras recuperar su producción de arábica con un crecimiento del 1,7% este año, las previsiones para 2025 son sombrías. Una sequía de cinco meses amenaza con reducir significativamente la próxima cosecha.
Según Márcio Ferreira, presidente del Consejo de Café Para los exportadores (Cecafé), la reducción será notable: “Lo más probable es que la producción del próximo año se reduzca significativamente”, afirma. Además, la presión de los fondos de cobertura y la nueva legislación europea sobre deforestación han contribuido a la volatilidad de los precios.
Colombia- resiliencia ante el desafío
Colombia, por su parte, alcanzó cifras récord en 2024. La producción anual de 13,41 millones de sacos refleja un crecimiento del 21% respecto al año anterior. Germán Bahamón, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, calificó estos resultados como “un testimonio de la resiliencia y adaptabilidad de los cafetaleros colombianos”.
Con ingresos de 14,2 billones de pesos (3.200 millones de dólares), el sector cafetalero se consolida como el motor económico del país, impulsado por el aumento de los precios del café en el mercado internacional. “2024 ha sido un año de tendencia al alza.
“Cerramos 2023 con un precio de $1,88 la libra (…), y hoy, en noviembre de 2024, celebramos un precio de $3,18 la libra”, subraya. Sin embargo, Bahamón advierte sobre la necesidad de renovar los cafetales y mantener políticas de fertilización para garantizar la sostenibilidad.
México – una cosecha afectada por la sequía
La sequía ha afectado gravemente a los productores de México en estados clave como Chiapas, Veracruz y Oaxaca. Según testimonios locales, la producción ha caído más del 50%. Moisés Ernesto, productor de Chiapas, describe la situación: “La planta está verde, pero no tiene la producción de café que debería tener”. Aunque México sigue siendo el octavo exportador mundial, las condiciones adversas han puesto en peligro la estabilidad de su cosecha.
Perú- estrategias para contrarrestar la caída
Las cifras también reflejan una disminución en Perú. Con una producción de 250.000 toneladas, el rendimiento medio cayó hasta los 658 kilos por hectárea, muy por debajo de la media mundial de 880 kilos. Factores como la roya amarilla y el envejecimiento de las plantaciones han afectado los rendimientos.
La Junta Nacional del Café (JNC) ha pedido medidas urgentes, como renovar 50.000 hectáreas y crear un fondo de 120 millones de soles (32 millones de dólares) para sostener la producción y apoyar a los 200.000 pequeños productores del país.
Costa Rica – crecimiento moderado en medio de desafíos económicos
Costa Rica espera un incremento del 8,6% en la cosecha 2024-2025, alcanzando 1,75 millones de sacos de 46 kilos. Pese a la mejora de los precios internacionales, situaciones internas están afectando a productores y exportadores, como la caída del tipo de cambio del dólar en un 25% desde julio de 2022. Las fluctuaciones en el tipo de cambio han generado quejas entre los productores, que enfrentan mayores costos locales con menores precios internacionales. ingresos. Honduras: beneficios inciertos frente a costos elevados.
Hondurascon una proyección de siete millones de quintales (317.800 toneladas) para la temporada 2024-2025, enfrenta altos costos de producción que eclipsan los beneficios de los precios internacionales. “No estamos recibiendo lo que es justo”, afirmó un productor de El Paraíso. Pese a ello, Pedro Mendoza, presidente de la República hondureña Café (IHCAFE), señaló que el aumento de precios podría generar nuevas oportunidades de empleo, especialmente en la zafra.