Santo Domingo.- El viceministro de recursos costeros y marinos, José Ramón Reyes López, reconoció la necesidad de que más inspectores controlen la venta ilegal de peces loros, a pesar de la prohibición impuesta por el Decreto No. 281-23. El decreto, que prohíbe la pesca y la venta de varias especies de peces herbívoros, tiene como objetivo proteger los ecosistemas marinos, pero la aplicación sigue siendo un desafío. Reyes López enfatizó que la conciencia pública es crucial, ya que el consumo continuo de pez loro daña las áreas como Boca Chica Beach.
Durante una operación reciente en Boca Chica en enero pasado, las autoridades cerraron a varios proveedores informales, lo que provocó quejas de funcionarios locales que argumentaron que muchos de los afectados eran padres de bajos ingresos. Si bien se han detectado violaciones entre los vendedores informales, el viceministro confirmó que no se han encontrado infracciones en las empresas formales.
Además del pez loro, el decreto también impone una prohibición estacional de otras especies marinas, que incluyen peces cirujanos, ángeles, mariposas y pepinos de mar. Reyes López reiteró la importancia de la aplicación y la cooperación pública para proteger los recursos costeros y marinos del país. Sus comentarios se hicieron durante una entrevista con Diario libre.
