Santo Domingo.- El expresidente Hipólito Mejía expresó su oposición a las deportaciones masivas de haitianos indocumentados por parte del gobierno dominicano, que ha provocado más de 40.000 deportaciones y pretende repatriar hasta 10.000 inmigrantes semanalmente. Mejía recordó políticas pasadas bajo el presidente Joaquín Balaguer, quien implementó sistemas de permisos para los trabajadores haitianos en la industria azucarera, sugiriendo que un enfoque similar podría ser beneficioso. Al resaltar la importancia de la mano de obra haitiana para sectores como la agricultura y la construcción, Mejía enfatizó que si bien la República Dominicana no puede soportar la carga de los problemas de Haití, los actores internacionales como Estados Unidos, Francia y Canadá deberían compartir la responsabilidad.
Pese a su llamado a un enfoque menos confrontacional, Mejía afirmó que la política migratoria es un derecho soberano dominicano. El gobierno dominicano también refutó recientemente las afirmaciones de una disminución de las deportaciones, tras las declaraciones del Ministro de Asuntos Exteriores haitiano, Dominique Dupuy.