Laboratorio en Australia realiza pruebas en personas infectadas con COVID-19, con un fármaco diseñado para pacientes con cáncer.
BromAc es un tratamiento que ha sido desarrollado durante 11 años por investigadores en Australia para pacientes con cáncer. Uno de los componentes principales del fármaco es una enzima extraída de la piña. Se sabe que esta fruta tiene una amplia variedad de vitaminas (A, B1, B2, B3, B5, B6, B9), minerales y enzimas, como la bromelina. Estos nutrientes colaboran para fortalecer la inmunidad y ayudar a eliminar la inflamación del cuerpo.
Según David Morris, uno de los investigadores del fármaco, la idea de usar la enzima ha surgido luego de observar que los cerdos que comían piña tenían mejor resistencia a las enfermedades gastrointestinales.
«Los resultados de nuestro laboratorio muestran que el nuevo fármaco hace que el pico de COVID-19 sea ineficaz, evitando que infecte otras células», dice. «Esperamos que los resultados muestren que el tratamiento puede limitar el COVID en la nariz y la garganta, prevenir la infección pulmonar y evitar que los pacientes infectados transmitan el virus vivo», explica.
La droga podría tener un efecto, según el laboratorio australiano, si la persona infectada toma la droga poco después de los primeros síntomas de la enfermedad. «Esto podría proporcionar una forma muy segura y eficaz de salvar vidas, proteger a los trabajadores vulnerables, prevenir hospitalizaciones y hacer que las personas infectadas vuelvan a su vida cotidiana», cree Morris.
De momento están desarrollando un ensayo con pacientes infectados en un hospital de Melbourne, y si se confirman los resultados positivos, podría empezar a aplicar el tratamiento a partir del próximo mes.