El número de crímenes perpetrados por las pandillas armadas que siembran el terror y el caos en Haití alcanzó nuevos récords, denunció la representante del secretario general de la ONU para el país caribeño en el Consejo de Seguridad.
«Por desgracia, la situación de la seguridad en el terreno sigue deteriorándose, ya que la creciente violencia de las pandillas sumió la vida de los haitianos en el caos. Los principales delitos están aumentando bruscamente hasta alcanzar nuevos máximos históricos». Eso dijo la ecuatoriana María Isabel Salvador, que espera que el envío de una fuerza internacional de intervención mejore la seguridad.
Según el informe sobre Haití del secretario general de la ONU, publicado el lunes, «las infracciones mayores, incluidos los homicidios voluntarios y los secuestros, registraron un aumento sin precedentes, principalmente en los departamentos del Oeste y en Artibonito».
Entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, la policía nacional registró 1.239 homicidios, frente a 577 en el mismo periodo de 2022. Y de julio a septiembre, 701 personas -entre ellas 221 mujeres, 8 niñas y 18 niños- fueron secuestrados, lo que supone un aumento del 244% con relación al mismo periodo del año pasado.
La ONU está también preocupada de las muertes perpetradas por grupos de autodefensa surgidos la pasada primavera. «Unas 388 personas fueron linchadas entre el 24 de abril y el 30 de septiembre debido a su presunta pertenencia a bandas» armadas, según el informe.
Ante esta situación, el Consejo de Seguridad dio su luz verde a principios de octubre para el despliegue de una misión multinacional al mando de Kenia. También fuera de la ONU, para ayudar a la policía haitiana.
«La recuperación del control por la policía haitiana es una condición previa para celebrar elecciones creíbles e inclusivas», insistió Salvador. Desde 2016 no ha habido elecciones en el país caribeño.
La luz verde del Consejo de Seguridad «creó expectativas a millones de haitianos tanto en el país como en el extranjero», agregó. «Esto suscita un destello de esperanza de ver la luz al final del túnel».
Según la resolución del Consejo de Seguridad, Kenia y los otros países que participarán en esta fuerza. Cuya misión es todavía un poco difusa, deben elaborar el plan de la misión.