A veces es difícil ponerse en la piel de una treintañera, por eso, de vez en cuando, necesitan vestidos tan especiales como estos.
Se estrena en diciembre aunque se desconoce la fecha exacta así que las seguidoras de Sexo en Nueva York cuentan los días para, primero, tener acceso a la plataforma HBO Max en la que se emitirá (a partir del 26 de octubre en España) y, finalmente, a los primeros episodios de And just like that… Seguramente, su mejor regalo de Navidad. Mientras, no pierden detalle de las imágenes que llegan del rodaje de la secuela más esperada. Han pasado 17 años desde que acabó la serie y 11 desde la última película, pero las hay muy cafeteras que no han olvidado las tramas, las frases o los estilismos que las marcaron desde finales de los 90. Por supuesto, la falda de tul, pero también el bolso baguette de Fendi, los broches en forma de flor o los zapatos joya Hangisi a los que Carrie ha regresado como sus fans no han dejado de hacer desde que la ficción se cruzó en sus vidas por primera vez.
Nadie se acababa de creer del todo que una columnista pudiera permitirse ese apartamento en Greenwich Village, como la mayoría tampoco podía empatizar con un personaje estereotipado que prefiería alimentar su armario que su estómago y sin embargo, aquel guión repleto de juegos de palabras, algunas (vagina) no se dejaban escuchar tan fácilmente en la televisión, cautivó a mujeres, treintañeras y fabulosas. Para eso estaban Miranda, Charlotte y Samantha para ampliar el espectro y conseguir que todas nos sintiéramos más o menos identificadas. Si de pequeña te pediste un Power Ranger, de adolescente eras una Spice Girl y después, una de las chicas SATC. Así fue para toda una generación que abarcaba a mujeres con la edad de Carrie entonces, que experimentarán un crecimiento en paralelo ahora; y otras, más jóvenes en aquel momento, que soñaban con beber Cosmopolitan y con que sus experimentos con la ropa salieran la mitad de bien que los de Patricia Field en su peor día.
A ellas y a su inconmesurable nostalgia va dedicada la nueva serie como todos los remake, reboot y reencuentros de las últimas temporadas. Desde Friends hasta El príncipe de Bel-Air. Como también van dirigidas algunas tendencias (hola, coconut girl) sin que esto quiera decir que estén vetadas para otros rangos de edad. Es decir, se pueden llevar perfectamente a los 50 y a las 20, pero han encontrado una popularidad particular entre aquellas chicas que ahora tienen 30 (y pico) y entienden un poco más a Carrie (y su estilo) de lo que lo hacían entonces. Tampoco es que quieran emularlo, solo que como el personaje en la serie, comienzan a sentirse cada vez más seguras vestidas un día de negro riguroso y al siguiente, de flores con tocado. Por la mañana con crop top y por la tarde con cuello alto. Como Carrie, han encontrado el placer de explorar todas sus facetas, hasta las más contradictorias, y de dirigirlas todas hacia un estilo propio. Un día afirman que podrían pasarse el resto de su vida en camiseta marinera y vaqueros y al siguiente, arrasan con los nuevos vestidos de Zara y H&M. De la Revista Glamour.
