El asesor de seguridad de los Estados Unidos, John Bolton, fue el primero en alertar al mundo sobre cómo el chavismo participa en la fuga de oro en Venezuela. «El régimen de Nicolás Maduro utiliza este sector como bastión para financiar actividades ilícitas y apoyar a grupos criminales«, afirmó el pasado 1° de noviembre. A partir de sus comentarios, EEUU prohibió a sus habitantes y empresas cualquier transacción relacionada con el metal proveniente del país caribeño.
El 1° de febrero de este año, Bolton fue más allá y escribió en su cuenta de Twitter: «Maduro no sólo requiere el apoyo de los paramilitares extranjeros para mantener los hilos restantes de una dictadura fallida, sino que los informes muestran que está sacando los activos venezolanos en un avión lleno. ¿Está robando recursos de la gente para pagar la intervención rusa?«. Su mensaje fue acompañado de un artículo de la agencia de noticias Reuters, que indicaba que el Banco Central de Venezuela (BCV) esperaba vender unas 15 toneladas de oro de sus reservas a Emiratos Árabes, a cambio de euros en efectivo para financiar sus importaciones.