Familia no pierde la fe y esperaba recibir equipos tecnológicos para que la Revolución Educativa llegara a su hogar

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SANTIAGO. –Superar las adversidades siempre ha estado en el ADN de la señora Lidia Checo, madre de la joven Cristal Vásquez Checo, de 13 años, estudiante del Liceo Jacinto de la Concha, la cual sigue los pasos de su progenitora, ya que está enfocada en sus estudios para ser una gran profesional.

Cristal es una de los miles de estudiantes beneficiadas con las computadoras suministradas por el Ministerio de Educación, a través de la Dirección de Informática Educativa, pero por motivo de la pandemia del coronavirus y el protocolo sanitario, no pudo acudir en persona a buscar su equipo.

Ante esa situación, la misión correspondió a la señora Lidia, quien se trasladó al Gran Arena del Cibao en busca de la laptop que convertiría a su hija Cristal en la joven más feliz del mundo, ya que en lo adelante podrá cumplir con todas las tareas virtuales sin mayores contratiempos.

Lidia y su hija Cristal se encuentran entre los miles de familias que nunca perdieron la fe en que el proceso de entrega de equipos tecnológicos continuaría y que finalmente la Revolución Educativa llegaría a sus hogares con las TIC.

Al afecto, la señora Lidia, tras superar varias situaciones, logró arribar al Gran Arena del Cibao y luego de cumplir los protocolos sanitarios establecidos en el lugar y las especificaciones del personal que tiene a cargo el proceso de entrega de los equipos tecnológicos, recibió la laptop de su hija, quien esperaba ansiosa en su residencia, ubicada en la calle Príncipe Felipe, del sector La Real.

Al conocer a la señora Lidia, un equipo de la Dirección de Comunicaciones del MINERD le acompañó de regreso hasta su residencia, para captar el momento en que la joven estudiante de segundo grado tendría en sus manos su nueva computadora, programada con los materiales didácticos requeridos en el sistema educativo.

Por motivo de las medidas de seguridad para prevenir el contagio del coronavirus, la entrega del equipo de la madre a su hija se realizó con distanciamiento, pero la felicidad de ambas fue más que evidente.

Luego de doña Lidia cumplir un proceso interno de desinfección, ambas se instalaron en la sala de la casa y allí procedieron a abrir la caja que contenía el esperado equipo.

Fue en este momento cuando Cristal agradeció a las autoridades del MINERD por la entrega de la computadora y se comprometió a darle el uso adecuado en el proceso de su aprendizaje.

Aprovechó para exhortar a sus compañeros de clase a ser obedientes, disciplinados y mantenerse enfocados en sus estudios.

En tanto que la señora Lidia dijo que como madre no tiene palabras para agradecer el acompañamiento y respaldo que ha recibido por parte de los docentes, de la escuela y de las autoridades del MINERD.