Las reparaciones del sistema de agua que alimenta a Ciudad de México y que han tenido en vilo a más de 3,8 millones de habitantes desde la semana pasada han sufrido un nuevo revés, retrasando el abasto del líquido a un récord histórico de 150 horas. La Comisión Nacional de Agua (Conagua) ha informado de que una de las nuevas piezas instaladas en el Sistema Cutzamala sufrió un desplazamiento en su montaje, por lo que fue necesario suspender el bombeo de agua al Valle de México.
Ramón Aguirre, director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), ha reconocido que la instalación de la pieza denominada como “K invertida” es muy compleja y no existe certeza del tiempo que se lleve a cabo dicha tarea. “Los trabajos tomarán de 36 a 40 horas, con lo que el corte de agua al Valle de México se prolongará por ese mismo lapso” ha dicho Aguirre en una entrevista con Radio Fórmula. Este domingo habían comenzado por la mañana el procedimiento para suministrar agua en bloque al Vallde México, pero horas más tarde se tomó la decisión de detener el procedimiento para evitar un daño mayor a la estructura. El director de Sacmex no ha descartado que la escasez el agua en algunas zonas se prolongue hasta después de este jueves
Las alcaldías Azcapotzalco, Iztapalapa y la zona alta de Tlalpan, Miguel Hidalgo y Cuauhtémoc son las más afectadas, mientras que Cuajimalpa y Magdalena Contreras presentan menos complicaciones, así como en 13 municipios del Estado de México. La Conagua ha pedido a los capitalinos que mantengan las medidas de racionalización del agua por el plazo que dure este contratiempo. Las autoridades locales han implementado un operativo con 1.200 pipas y 90 tinacos para mitigar los efectos del desabasto.
La cuenca del Sistema Cutzamala proporciona el 26% del agua consumida en la ciudad más poblada del continente, donde conviven diariamente más de 20 millones de personas. Las obras de mantenimiento sobre este sistema comenzaron el miércoles pasado y aunque en un inicio se había proyectado un parón de 72 horas, la complejidad de las tareas ha llevado a esperar una suspensión de hasta 150 horas. Los trabajos, con un coste de 25 millones de dólares implican la instalación de una segunda tubería en la planta potabilizadora de la capital del país.
Durante los días de desabasto del líquido, miles de personas han recurrido a almacenar el agua en tinacos, cubos y hasta en jacuzzis para enfrentar la escasez de agua. Se estiman pérdidas de 207 millones de pesos por ventas no realizadas de los negocios que tuvieron que cerrar durante la suspensión del suministro de agua.
vía:elpaís.com
