Con 837 estudiantes matriculados accionando en aulas, talleres y laboratorios
MOCA, Espaillat. – Hacer un recorrido por las aulas, laboratorios y pasillos del politécnico El Corozo, de este municipio, no tiene desperdicio. Encontrar a los estudiantes en plena faena elaborando productos químicos para varios usos, confeccionar prendas artesanales o sentarse a escuchar hermosas melodías interpretadas por de la banda musical, es el mejor ejemplo de la calidad que exhibe el sistema educativo dominicano.
Los 837 estudiantes del Nivel Secundario matriculados en este politécnico, que se ha convertido en un centro educativo modelo en la zona, son el mejor ejemplo de esfuerzo conjunto logrado cuando fue integrado a la Jornada Escolar Extendida.
Pedro Paulino, director del centro escolar, destaca que con el paso de un liceo a politécnico tuvieron que comenzar a diversificar la oferta curricular, pero siempre basados en la integración, como lo promueve el Ministerio de Educación, y su incumbente Antonio Peña Mirabal.
Los estudiantes ocupan sus horas extracurriculares para hacer lo que les gusta. Algunos se han inclinado por el área química y producen shampoo, gelatina y gotitas de brillo para el pelo, así como cloro, alcoholado, entre otros.
En la biblioteca se imparten talleres de confección, manualidades, pintura y lengua de señas, mientras al lado, funciona la escuela de música “Sembrando sueños donde no había Esperanzas”. En tanto, en los espacios deportivos se enseñan 16 disciplinas, entre ellas baloncesto, voleibol, bádminton, baseball y softbol, judo, lucha olímpica y taekwondo.
En este centro educativo no se desaprovecha ningún espacio, y los pasillos están ocupados por mesas de dominó y ajedrez, con sus respectivos instructores, donde los estudiantes practican en sus horas libres.
Además, se ofrecen clases en áreas como la robótica, electrónica, informática, gestión administrativa y tributaria, animación sociocultural y terapia.
El centro educativo también tiene un programa apoyado por las escuelas básicas y empresas del entorno, donde los estudiantes de sexto de Secundaria (4to. de Bachillerato), realizan sus pasantías y destacan su vocación por las carreras de Educación, Contabilidad y otras áreas administrativas.
El politécnico tiene matriculado un grupo de estudiantes sordomudos y cuenta con un personal formado por el Instituto Técnico Profesional (INFOTEP), que trabaja para integrarlo mediante cursos de señas.
Las aulas y los pasillos del centro educativo están dedicados a personalidades de la historia. Por ejemplo, en el aula del amor se visualiza la imagen de la Madre Teresa de Calcuta, mientras en la de medio ambiente está encuentras elementos de la naturaleza. También están las aulas de Pitágoras, la Pablo Neruda, donde está escrito el poema 20, o la de diversidad, una con elementos de historia, de instrumentos matemáticos o de física.
Pizarras de desahogo
Los estudiantes del politécnico El Corozo han encontrado una forma divertida de manifestar sus sentimientos y hasta para aclarar inquietudes acerca de su programa escolar a través de las “las pizarras de desahogo”, que han sido colocadas en lugares estratégicos para esos fines.
El aprovechamiento de las paredes de la escuela, a través de las pizarras, es una forma de buenas prácticas, ya que, además, son utilizados por los estudiantes para mostrar lo buenos trabajos que realizan en sus aulas, y por los maestros para que los alumnos reciban tutorías de nivelación. Además, cuenta con un sistema de vigilancia con 102 cámaras.
