SANTO DOMINGO.- El ministro de Educación, Antonio Peña Mirabal, ordenó a todos los directores regionales y distritales reforzar las medidas de seguridad e higiene que se toman en las escuelas y liceos antes, durante y después de entregar los kits alimenticios para garantizar la salud de las familias por el estado de emergencia nacional ante el COVID-19.
Mirabal dispuso aumentar los protocolos de cuidado para reducir las posibilidades de contagio ante la pandemia de coronavirus, medidas que contemplan lavado de manos en la entrada y salida de los centros, uso obligatorio de guantes y mascarillas, desinfección de los paquetes con los alimentos crudos y el distanciamiento sin distinción de todo el personal.
En ese sentido, la directora del centro María Marcia Comprés en Santo Domingo Este, Liliana Paulino, precisó que desde el inicio de la distribución de kits han tomado medidas óptimas de seguridad y salud, pero con este llamado del ministro de Educación decidieron reforzarlas aún más, con todo lo necesario para evitar un posible contagio.
Agregó que diseñaron una logística de entrega que ha permitido mantener a los padres, madres y tutores alejados uno de los otros, se les exige el uso de mascarillas y guantes, además de que deben lavarse las manos a la entrada y salida del plantel, pasando por tres estaciones de confirmación estudiantil y verificación de la salud individual.
“No podemos educar bien si no damos un buen ejemplo. Hemos asumido con mucha responsabilidad las medidas extremas de seguridad e higiene, con apoyo diario de la Policía Escolar y agentes de la Policía Nacional que hacen rondas para garantizar la seguridad de las personas y el plantel”, precisó Paulino.
En caso de que el representante del estudiante no cumpla con las medidas de lugar, se evita la entrada al centro y el personal de colaboración le lleva la ración correspondiente hasta la puerta para que cada estudiante reciba sus alimentos.
Para todo eso cuentan con una red de voluntarios donde se incluyen maestros y maestras de este liceo en modalidad en artes, representantes de la Asociación de Padres, Madres y Amigos de la Escuela, APMAE, personal de la comunidad que se ha empeñado en colaborar y los agentes del orden.
José Luis Sánchez, presidente de la APMAE de este liceo, manifestó que mientras más se cumpla con las medidas de higiene, más protegida y segura estará la familia de cada estudiante, por lo que exhortó a los parientes tomar todas las medidas de higiene posible al momento de retirar los alimentos, haciendo uso indispensable de la mascarilla y guantes.
En ese tenor, la directora del liceo Juan Pablo Duarte del distrito 10-04, Maribel Ávila, señaló que además de los guantes y mascarillas, también usan lentes e indumentarias para cubrirse el cabello, lo que aumenta la higiene. Sumado a eso usan alcohol y cloro para desinfectar las bolsas con alimentos crudos que son entregadas a las familias.
También se lavan las manos antes, durante y después de concluir las entregas. “Cuando terminamos, nos lavamos las manos con los guantes, después nos lo quitamos y nos la volvemos a lavar para evitar que esos guantes puedan contagiar al personal del ayuntamiento que viene a retirar la basura”.
El mayor de la Policía Escolar, Manuel Batista, precisó que las medidas contemplan separar a los padres a dos brazos de distancia y todos deben tener protección en las manos y rostro, a los fines de garantizar que no se contagien, ni contagien a otros si padecen la enfermedad.
Además, después que termina la distribución, los agentes se quedan en los centros hasta que se vaya el último personal y durante el resto del día patrullan los recintos para confirmar que no haya ningún imprevisto. Trabajan en coordinación con el personal de vigilancia nocturna de las escuelas y las APMAE.
En el caso de los voluntarios, la colaboradora Mirta Carpio dijo que se ofreció como voluntaria porque es una forma de respaldar y ayudar con el proceso de entrega, lo que facilita y agiliza que cada familia tenga su ración de forma más rápida y así exponer menos a sus parientes.
“Esta ayuda es muy buena porque podemos mantener a los niños en las casas y lo menos que los padres podemos hacer es aportar, ya sea en la escuela o el hogar. No podemos dejarle todo a las autoridades, ya ellos están cumpliendo con darnos alimento y mantener la educación por la plataforma virtual, ahora nos toca a nosotros aportar”, consideró.